miércoles, 16 de abril de 2008

Luces

Y esta vez olvidé lo que buscaba.
Por el lado y de frente se toparon sus miradas. Encontró lo que no se suele apreciar con regularidad.
Quedo retraída con su luz.
Ni imaginó que en el camino a realizar un simple y desagradable trámite, se convertiría en uno de esos momentos reafirmantes de esperanza; de fe y esperanza.
Una mirada extraviada, señalaba el camino por el cual se perdían sus ojos, manos, boca, pies. Una quietud innata.
Cada segmento que lo componia lo deshabilitaba. Encerrado estaba, prisionero por paredes similares a las de las cajas que traen regalos y cosas especiales. Esta caja era una de esas que traían verdades rosas, y marrones como el tono de su iris, como el tono de sus zapatos de suelas intactas.
Esperaba...a quién espera
Demoré en volver a mi, al rato en que cruzaron los manifestantes, el coche avanzó pero el bus en que iba lo adelantó.
Qué es lo que (me) falta

domingo, 13 de abril de 2008

21:34

Mientras jugaba con la taza y la bolsa rota. Pensaba en lo que antes daba por perdido; alejarlo para que no se pierda frente sus narices.
Se aclaro un par de puntos que hace unos dias habían creado situaciones incómodas. Porque no acostumbra a callar, ni a gemir por las esquinas.
Se paro y siguió al compás que le dio la gana, cuando quiere toma y retoma, mas lento de lo que te deja.
Asi deja extendida su mano...

miércoles, 2 de abril de 2008

20:52

Un poco en estragos,ayer quedo el soldado. No trajeron su baqueta ni la correa de su tambor.
Los cuentos eran inmumerables. De a prisa inundaron sus bocas con actos que ya no eran mas que recuerdos aprendidos. Que sin pensarlo motivaron mas de un tema, mas de una oración. No poseían indicios de sus creencias, una que otra certeza que su carrera le brindaba pero no mas de lo que sus ojos limitaban.

Que prometió y mientió; eso fue de dia

Los papeles los paso por debajo donde se juntaron; sin juntar miradas , ni sonrisas ni carcajadas. Ya no hubo tiempo para pláticas -las explicaciones le provocan una que otra puntada en sus sienes- espero hasta la hora indicada, no llego y se hizo de noche.